En inglés, they está ganando terreno como el pronombre para las personas que no se identifican ni como hombres ni como mujeres

Fuente (editada): El Observador | 2 de diciembre de 2019

Hace algunos años, Emily Gardner, quien se identifica como «más femenina que no, pero no exactamente mujer», pidió a su familia dejar de ser referide como «ella» y usar en su lugar un pronombre neutro. Le joven de 23 años representa una tendencia creciente entre les estadounidenses progresistas, que reclaman el derecho a elegir su propio pronombre, independientemente del sexo que le asignaron al nacer.

Es una batalla que se cristaliza en tarjetas de presentación, firmas de correo electrónico y redes sociales, donde muchas personas aclaran directamente cuál es su pronombre preferido. En inglés, «they» (que significa tanto «ellos» como «ellas») está ganando terreno como el pronombre elegido por las personas «no binarias» que no se identifican ni como hombres ni como mujeres. En español, el equivalente sería «elle», un término aparecido en el marco del lenguaje inclusivo.

La librería de Filadelfia que emplea a Gardner está embarcada en esta cruzada, con un cartel pegado en el mostrador que dice: «Por favor, no asuma los pronombres de las personas empleadas, pregunte».

«No es nuevo»

«Las personas no binarias han existido desde siempre. No es nuevo, no es una tendencia, es solo quienes somos», dice Pidgeon Pagonis, une artista de Chicago que usa el pronombre «they». «Cuando la gente no respeta mis pronombres, me retraigo, no me siento bien», señala Pagonis, quien lanzó la marca de ropa «Too Cute To Be Binary» (Demasiado Lindo Para Ser Binario).

Los pronombres de género neutral, confinados durante mucho tiempo a la comunidad LGBTQ, «se están volviendo cada vez más populares, incluso más allá de las grandes ciudades», dice la socióloga Carla Pfeffer. «El auge de las redes sociales significa que las transformaciones culturales pueden ocurrir más rápido y difundirse más ampliamente que en épocas anteriores», agrega.

También ayuda que las personas no binarias disfruten de una mayor representación en la televisión y en la cultura pop, como le artista de Gran Bretaña, Sam Smith, quien recientemente reveló su preferencia por el pronombre «they» después de «toda una vida de estar en guerra» con su género.

Sin embargo, el uso de «they» no es tendencia en todos los sectores y puede dar lugar a burlas, con las personas críticas señalándolo como una exageración políticamente correcta. Estuve en «un Starbucks esta mañana y las baristas tenían sus pronombres de género aprobados», tuiteó hace poco el activista conservador pro-Trump Charlie Kirk. «Estamos creando una sociedad de personas esperando a ser ofendidas», dijo.

«Me enoja»

Mallory Cross, cuyo cabello es corto, asegura ser consciente de cómo se ve y cómo la gente le lee: «Muy masculina». «Cuando hago un gran esfuerzo para lucir de esa manera y la gente me llama ‘señora’ o me sostiene la puerta, me enoja», cuenta.

En Nueva York, una tienda de ropa «de género neutral» llamada The Phluid Project vende faldas, gorras y zapatos con tacones grandes, alentando a la clientela a «ir más allá de lo binario». La capital financiera estadounidense ha adoptado esta mentalidad y ofrece desde enero una nueva categoría neutral, que las personas pueden usar para modificar el género en sus certificados de nacimiento.

Mientras tanto, el diccionario Merriam-Webster recientemente agregó a «they» el significado de pronombre no binario que puede referirse a una sola persona. Y Apple ha añadido emojis «neutrales» que no distinguen entre géneros en la última versión de su sistema operativo, mientras que Google, creador del sistema operativo para móviles Android, había presentado en mayo sus propios emojis no binarios.

A medida que la tendencia se acelera, un número creciente de personas que sí se identifican como binarias aclaran en señal de solidaridad sus pronombres «ella» o «él» en sus cuentas de redes sociales y otros lugares. Elizabeth Warren, una de las principales candidatas en la interna demócrata para disputar las elecciones de 2020, se convirtió el mes pasado en la sexta candidata en agregar su pronombre, que corresponde al sexo que le asignaron al nacer, en sus redes sociales. «Toda persona merece ser tratada con dignidad y respeto, y eso comienza con el uso del pronombre correcto. Soy Elizabeth. Mi pronombre es ‘ella'», escribió en Twitter.

El candidato Pete Buttigieg, que es gay, ha especificado que es un «él», y otras personas candidatas heterosexuales como Julian Castro, Cory Booker, Kamala Harris y Tom Steyer también han indicado sus pronombres.