Fuente (editada): dosmanzanas.com | Humming Albus | 27/09/2020

El Consejo Nacional, la cámara baja del Parlamento suizo, ha aprobado un proyecto de ley que simplifica el proceso para la modificación registral del sexo asignado al nacer. El nuevo texto elimina la tutela judicial y médica a la que obliga la legislación vigente, con el consiguiente ahorro de tiempo y dinero en el proceso. También suprime la necesidad de consentimiento parental para las personas menores que quieran ejercer su derecho al reconocimiento de su identidad. La medida incorpora los principios de autodeterminación y despatologización de las personas trans, en la línea de las normas que ya han aprobado otros países europeos.

En la actualidad, el proceso para modificar el sexo asignado al nacer en Suiza es complejo y varía según el cantón. Se trata de un procedimiento judicial que lleva aparejados elevados costes y plazos prolongados, además de una considerable inseguridad por depender de la decisión de un juez. En la mayoría de los cantones se exigen, además, informes médicos que apoyen la petición de la persona interesada.

En junio de este año, el Consejo de los Estados (la cámara alta) aprobó un proyecto de ley sobre identidad sexual que pretende simplificar estos trámites. El texto elimina la tutela judicial y médica y consagra un sencillo procedimiento administrativo uniforme en todo el país. Ante la indignación del activismo, sin embargo, los legisladores añadieron la obligación del consentimiento parental para las personas menores de edad, requisito que no existe en la normativa vigente.

El pasado jueves, el Consejo Nacional aprobaba, por 121 votos a favor frente a 61 en contra, el proyecto de ley de la cámara alta. Además, con 100 síes frente a 93 noes, revertía la necesidad del consentimiento de una persona progenitora o tutora legal en el caso de menores. Un cambio que deberá ratificar el Consejo de los Estados, desdiciéndose o manteniendo su posición inicial. Los colectivos LGTBI se han felicitado por la rectificación de la cámara baja frente a una imposición que «añadía innecesariamente gasolina al fuego de posibles conflictos intrafamiliares».

Cuando entre en vigor, la norma colocará a Suiza en el grupo de cabeza de los países con legislaciones más avanzadas en materia de derechos trans. Una lista en la que se encuentran, en el continente europeo, países como Dinamarca, Grecia, Irlanda, Islandia, Malta o Portugal y a la que podría añadirse próximamente Alemania. En España, mientras tanto, sigue vigente la necesidad de un diagnóstico de «disforia de género» y la exigencia (con algunas excepciones) de dos años de tratamiento hormonal para que tu identidad sea legalmente reconocida en todos los documentos oficiales.