Los gobiernos aplicaron entre 1985 y 2014 una ley trans que obligaba a las personas que querían cambiar su identidad sexual a someterse a una operación y a ser esterilizadas de forma irreversible.

Fuente (editada): PÚBLICO | EFE | 28 NOV 2021

El Ejecutivo neerlandés en funciones se disculpó el pasado 27 de noviembre, en nombre de los gobiernos que aplicaron entre 1985 y 2014 la ley trans que obligaba a las personas que querían cambiar su identidad sexual a someterse a una operación y a ser esterilizadas de forma irreversible.

La ministra neerlandesa de Educación y Cultura, Ingrid van Engelshoven, ofreció la disculpa y subrayó que las víctimas, trans e intersex, recibirán una compensación de 5.000 euros por el daño causado al haber sido obligadas a elegir entre vivir con un género que no coincidía con su identidad, o someterse a una cirugía y esterilización de por vida.

Van Engelshoven consideró “deshumanizantes” estos requisitos y explicó que “durante décadas, ha habido personas que se sometieron a tratamientos médicos que no querían en absoluto, pero que sabían que esa era su única opción” para ser ellas mismos, mientras que “otras personas han optado por esperar por culpa de esta ley, y se han visto obligadas a posponer su conversión durante años”.

Una de las víctimas de esa ley, Willemijn van Kempen, fue la primera en exigir en 2019 que se pidan disculpas, un reconocimiento del daño causado y una indemnización por haberle dado una “elección imposible” en los años ochenta, cuando hizo su conversión. “El Estado me arrancó la fertilidad”, denunció en declaraciones a la televisión pública NOS.

La Red Neerlandesa de Personas Transgénero (TNN) asegura que, al menos desde 1995, más de 1.200 personas han sido víctimas de esta norma, aunque el Ministerio de Educación y Ciencia estima que unas 2.000 personas tendrán derecho a la compensación.

Miriam van der Have, directora de la Organización para la Diversidad Sexual (NNID), celebró que el Ejecutivo dé el paso de pedir disculpas, pero lamentó que esto también “abre viejas heridas que no son fáciles de cerrar con disculpas o una suma de dinero”.

Descubrió a los 19 años que es intersexual: tenía cromosomas XY y el cuerpo de una mujer, pero fue registrada como un niño al nacer. Para reasignar el género, tuvo que pasar por quirófano, “una operación que fue más allá de lo que ella hubiera querido”, dice.

“Al final me desperté sin clítoris, me privaron de la oportunidad de tener placer sexual. Todavía estoy enfadada por eso. Es muy fuerte no haber conocido el placer sexual durante 35 años porque me han eliminado los nervios”, denunció esta víctima, que ha estado hoy en el acto oficial encabezado por la ministra.

A las víctimas tampoco se les permitió conservar material genético para poder tener descendencia eventualmente después de la esterilización.

El Gobierno neerlandés, liderado también entonces por el liberal Mark Rutte, modificó en 2014 la ley trans porque consideró que violaba los derechos humanos.

Abolió el requisito de la esterilización obligatoria y facilitó la posibilidad de cambiar el sexo registral en un certificado de nacimiento, lo que llevó a un aumento en el número de personas que oficialmente cambiaron de género en sus documentos de identidad.