El hombre ejercía violencia psicológica contra la joven. Un juez consideró que los maltratos constituyen violencia familiar y una forma de discriminación.
Fuente (editada): cba24n | 8 DE ABRIL DE 2020
El Juzgado de Competencia Múltiple de la ciudad de Bell Ville le ordenó al padre de una joven trans, de 17 años, que por 60 días resida fuera del hogar familiar de manera provisoria.
La decisión se adoptó luego de que la adolescente, que vive en un pueblo de la región, denunciara al teléfono 0800-888-9898 que sus progenitores ejercían violencia psicológica y ambiental contra ella, porque les provocaba rechazo que se autopercibiera como mujer.
El personal del juzgado, que cumple funciones desde su domicilio, se comunicó telefónicamente con la joven luego de recibir la denuncia a través de la Secretaría de Lucha contra la Violencia a la Mujer y Trata de Personas.
Ella expresó que tanto su familia como algunas personas que trabajan en las instituciones locales no aceptan su identidad sexual y la tratan como varón aunque que ella se autopercibe mujer. También solicitó que su padre se retire del domicilio para intentar la convivencia con su madre.
Además de la exclusión, el juez Eduardo Pedro Bruera dictó una prohibición de acercamiento para el padre (a 100 metros de distancia) y una prohibición de comunicación con su hija. En la resolución, dispuso que estas medidas duren 60 días, aunque pueden modificarse antes si cambia la situación familiar.
El magistrado explicó a les progenitores de la adolescente que los maltratos y la humillación hacia su hija a causa de su identidad sexual “son tipos de violencia familiar y una forma de discriminación que pueden causar daños muy graves a su integridad”.
Asimismo, advirtió a las instituciones locales que el derecho de la joven a recibir un trato digno no es una opción que dependa de la apreciación de cada persona, sino que es una obligación institucional; cuyo incumplimiento puede acarrear la aplicación de sanciones legales.
Finalmente, el juez Bruera ordenó la designación de una “abogada de infantes o adolescentes” para que asesore y represente los intereses de la adolescente. La profesional que actuará en representación de la víctima menor de edad fue elegida por la propia adolescente del listado remitido por el Colegio de Abogados de Bell Ville.
Todas las medidas adoptadas en la causa se llevaron a cabo a través de llamadas telefónicas, comunicaciones vía WhatsApp y correos electrónicos entre el personal del juzgado, las autoridades locales y la joven denunciante, en cumplimiento con el aislamiento social obligatorio que rige en el país.