Fuente: EUFORIA FTA | 08 NOV 2024
De nuevo el tiempo que abarca un fin de semana adquiere plasticidad, parece estirarse mientras lo vivimos, para empezar a encogerse el domingo a medio día y dejarnos la sensación de que ha pasado extremadamente rápido.
Un fin de semana complejo en el que nos metimos en una burbuja conscientes del horror que se estaba viviendo en Valencia. Algunas familias con las que teníamos previsto compartir no pudieron acudir por encontrarse en la zona afectada.
Casi doscientas personas convivimos desde el viernes a las cinco de la tarde repartiéndonos en talleres y actividades. Una treintena de peques menores de 12 años disfrutaron de actividades socioeducativas, combinando el juego y el aprendizaje, creando lazos afectivos y generando sentimiento de pertenencia a una comunidad. El equipo de monis facilitó las actividades y disfrutó con las familias del encuentro.
Por primera vez un taller dirigido al grupo de entre 12 y 13 años fue facilitado por jóvenes de EUFORIA mayores de edad que gestionaron el espacio, abriendo conversaciones en las que se pudieron aclarar dudas y compartir reflexiones, experiencias y conocimientos con unos resultados fantásticos.
Varias sesiones de los talleres “Violencia estética y gordofobia” y “¿Quién tiene el mapa?” completaron las actividades dirigidas a les jóvenes. Aprender a identificar las violencias, explorar estereotipos y mandatos sociales, fueron los objetivos del primero, a cargo de Rubén Castro. En el segundo se propició la observación de la normatividad respecto al género y las consecuencias emocionales y sociales de quedar en los márgenes aprendiendo a identificar los sentimientos y emociones que se generan, siendo facilitado por Tina Gubau Torrent y Dani Sánchez Hernández.
Rubén Somalo Toyas acompañó a la parte adulta de las familias en un viaje emocional en el que dotarse de estrategias y herramientas para mirar con perspectiva la relación con les hijes y poder mejorarla.
Cuando el mundo que nos rodea se ha construido en una base estructural y conceptual que excluye la existencia de nuestres hijes, y genera violencias múltiples a muchas personas, analizar esa estructura ampliando sus límites, proponiendo el uso del lenguaje inclusivo de forma cotidiana como herramienta para enfrentar las violencias sistémicas fue una de las aportaciones, junto con un repaso y ampliación de conceptos en materia de diversidad sexo-genérica, de las compañeras y talleristas Anaïs Alderete y Elena Molinero Garau.
Por supuesto, también hubo un espacio para compartir y resolver dudas de carácter práctico de la vida cotidiana y de las barreras, de carácter técnico, que enfrentamos acompañando a las infancias y juventudes trans. Fue facilitado por Natalia Aventín Ballarín y Saida Garcia Casuso.
La mesa conversatorio se ha convertido en uno de los espacios más apreciados de estos encuentros, esta vez nos acompañaron Yun Ping Li y Gabriel d’Artemius y nos quedamos con las ganas de contar con la participación de Alana Portero, que por un imprevisto de última hora no pudo acompañarnos. Fue Natalia quien les entrevistó consiguiendo un espacio entretenido, en el que sus obras fueron el sustento de una conversación que giró entorno a la comunicación, los idiomas, el arte, las redes sociales, el lenguaje no binario y la literatura que lo recoge, racismo e interseccionalidades, los recuerdos de sus infancias trans y las expectativas de futuro.
También hubo espacio para fiesta, porque celebrar es imprescindible. Las Vedettes de Usera, Travela Vargas y Mujer Vaquero, trajeron el Maribingo con sus actuaciones e irreverencias, el resto pusimos las ganas, los disfraces y el maquillaje, resultando un Jalogüin Mamarracho de lo más interesante.
La mañana del domingo tuvo lugar la mesa de jóvenes que con sus aportaciones, una vez más, nos dejaron con el cuerpo removido, muchas emociones que digerir y tarea para casa.
Como siempre ocurre en estos encuentros terminar es difícil, se rompe la burbuja y la realidad cotidiana acecha, despedidas, abrazos, miradas cómplices y una añoranza que asoma y que alimenta las ganas de que llegue el siguiente.
Sólo nos queda agradecer su colaboración en la financiación de este encuentro a la Unión Europea que, a través de Calala, y dentro del marco de la Convocatoria “Vida Libre de Violencia”, ha facilitado la organización y la asistencia de familias que de otro modo no hubieran podido asistir.